El restaurante se ha edificado con estrictos criterios medioambientales y se integra a la perfección en el paisaje; para ello, se han elegido tonos ocres y amarillos, típicos de Namibia, junto a vegetación inspirada en la frondosidad caribeña de Tulum y elementos constructivos ibicencos. Su cocina, de fuego, da preponderancia a la despensa ibicenca, que se une a elementos y sabores más exóticos para crear platos vistosos e ideales para compartir.
Ya ha abierto sus puertas Madunia, el nuevo restaurante en Cap Negret (Ibiza) que ha sido concebido para trascender el concepto de ‘sitio de moda’ y convertirse en un clásico de la Isla Blanca gracias, cómo no, a su gastronomía, pero también a su espectacular diseño, plenamente integrado en la inmensidad mediterránea de esta tranquila zona ibicenca. Con una extensión total de más de 25.000 m2, se ubica en una ladera, lo que supone un reto para la edificación, pero también la oportunidad para crear un restaurante con una idiosincrasia muy especial: a lo largo de 2.000 m2 se despliegan íntimos comedores ajardinados en cinco niveles. Un comedor interior, con una azotea con las mejores vistas, completa las instalaciones de un lugar cuyo nombre, Madunia, es un homenaje a ‘Mama Dunia’, la Madre Naturaleza y, a la par, a la rica despensa ibicenca.
Como explica Mehdi le Mair, fundador de este estudio neerlandés, «Era prioritario conseguir que la edificación fuera respetuosa con el entorno circundante, por lo que el equipo ha seguido unas directrices estrictas para minimizar la perturbación del ecosistema. Y una buena pista de cómo actuar nos la dieron los propietarios, que son unos entusiastas de los viajes. Hay tres lugares en el mundo que les apasionan: Namibia, Tulum e Ibiza. Y estos tres enclaves, maravillosos, nos han servido de inspiración para crear Madunia. Del país africano hemos escogido los tonos ocres y arena, los estampados y ciertos guiños a su estilo arquitectónico vernáculo. De Tulum, la feracidad de la vegetación. Y de Ibiza, influencias típicamente isleñas, como los muros de piedra seca y elementos decorativos hechos por artesanos locales, como las vistosas pérgolas».
IBIZA EN EL PLATO CON AIRES LATINOS
Al frente de las cocinas del espacio, que solo funciona en horario de cenas, se encuentra Ivan Arauz Beusink, chef ejecutivo, un nicaragüense con una amplia experiencia en restaurantes de Países Bajos con estrella Michelin como RIJKS (Ámsterdam). En Madunia, Arauz Beusink echa mano de sus raíces latinoamericanas y de las técnicas más avanzadas de la alta cocina para hacer brillar los mejores productos ibicencos. La de Madunia es, fundamentalmente, una cocina de fuego (el Josper es un instrumento esencial del equipo) que se materializa en platos muy sabrosos, con un toque especial y un emplatado limpio, perfectos para compartir y disfrutar en familia o con amigos. Bocados como el cangrejo real, con pipián verde (guiso tradicional mexicano) y tostadas, el caviar con gofres ahumados, la infladita de ternera o ensalada de lechuga asada funcionan a la perfección como entrantes. El capítulo de principales es breve pero eficaz, con platos marineros, como la lubina salvaje a la sal, el rodaballo entero con salsa de mantequilla ahumada. Diferentes guarniciones y postres golosos, como una peculiar versión de los churros, la cuajada de coco con chocolate y raspadito de pomelo o la piña asada con una nube de pimienta rosa son algunas de las propuestas.
Al frente de la bodega del espacio se encuentra la italiana Cristina Flora, que cuenta una dilata experiencia como sumiller en su país natal y en Australia. Para Madunia ha creado una carta de vinos con un equilibrio entre referencias de pequeños productores –con una querencia de proyectos de mínima intervención e interesados en la biodinámica y el cultivo sostenible— y de otras grandes casas. Por su parte, la polaca Aneta Nowak es la Head Bartender del establecimiento, una barmaid con 18 años de experiencia que ha creado diez cócteles de autor con materias primas ibicencas y los mejores destilados. Destaca Sango –por el dios del trueno—, que promete estar entre los favoritos del público, un trago a base de un mezcal joven de nivel como Ojo de Dios con higos, cardamomo y lima.