Los límites del diseño están cada vez más alejados de establecerse. La levitación magnética se alza como una nueva tendencia del sector, convirtiendo lámparas, relojes y macetas en decoración flotante.
¿Se pueden poner límites al diseño? La gravedad ha dejado de ser un impedimento para el mundo de la decoración gracias a la revolución del magnetismo. Los diseñadores han comenzado a introducir la levitación magnética en un sinfín de elementos. Relojes, lámparas y ornamentos se han convertido en los protagonistas de esta nueva tendencia.
Para conseguir que un objeto “flote” y se mantenga estable en un equilibrio, se debe aplicar una fuerza que cancele el peso del mismo. Los campos magnéticos tienen aplicaciones técnicas en todos los ámbitos, que van desde los timbres de las puertas hasta los trenes al estilo Maglev. Desde los descubrimientos de Nikola Tesla en el siglo XIXI, se ha ido perfeccionando esta técnica hasta aplicarse al mundo del diseño.
ILUMINACIÓN Y MAGNETISMO
Flyte, creado por Simon Morris, fue el proyecto pionero en el entorno de la iluminación y el magnetismo. El diseñador sueco creó una bombilla que levita sin necesidad de baterías. La base, de materiales sostenibles, es la encargada de transmitir la energía a los LEDS de la bombilla de forma inalámbrica.
Para ponerla en funcionamiento hay que acercar la bombilla al centro de la base magnética. Una vez colocada queda bloqueada, se enciende y comienza a girar suavemente. Para encenderla y apagarla únicamente hay que tocar un sensor táctil de la base, que también sirve como cargador de smartphones.
El modelo de Morris pronto fue imitado. Estos nuevos proyectos lumínicos mantuvieron el funcionamiento de Flyte e introdujeron leves cambios en el diseño, cambiando la bombilla por otros objetos o modificando la forma de la base magnética. Las más repetidas han sido las lámparas dedicadas al sistema solar y los elementos del cielo: la luna que levita o la tierra flotante.
Floating Cloud es la última creación de Richard Clarkson Studio, en colaboración con la firma holandesa especializada en levitación por magnesio Crealev. Se trata de una lámpara de mesa flotante formada, de nuevo, por dos partes: una base y una nube flotante, ambas magnéticas.
El diseñador industrial Zanwen Li va más allá. Revoluciona el sector de la iluminación con la serie de lámparas Heng. Estas lámparas de mesa se caracterizan por tener un sistema de encendido basado en corrientes magnéticas. Cada diseño se compone de una estructura (redonda, ovalada o cuadrada, según el diseño) y dos esferas, las cuales proporcionan la iluminación al unirse.
¡LOS RELOJES TAMBIÉN PUEDEN FLOTAR!
La levitación magnética no se limita al sector de la iluminación. Story, de Simon Morris, es un reloj de pared que marca la hora con una esfera (que ejerce de manecilla) que orbita sobre una base de madera lumínica. Se puede emplear como un reloj convencional, que marque los segundos, minutos y horas; pero también se puede personalizar. A través de una aplicación móvil, este reloj de pared puede marcar momentos especiales como cumpleaños, eventos o viajes futuros. También incluye otros datos, como las fases lunares, datos meteorológicos o temporizador.
Y esto no acaba aquí. La levitación magnética comienza a proliferar en el mundo del diseño, llegando a crear macetas, globos terráqueos y todo lo que se te pueda ocurrir. ¿Qué será lo próximo?
