Bolita es una lámpara de intensidad modular diseñada para invita a usar el tacto al cambiar la cantidad de luz emitida. Su diseño naturalista y sencillo ha sido premiado con el Premio Delta de Plata en un momento en el que prima lo puramente tecnológico y futurista.

Kaschkasch, el estudio detrás del diseño de Bolita, ha apostado por un mecanismo de luz dimmer, pero de una manera innovadora, ya que la mayoría de los que hay en el mercado actualmente funcionan a través de mandos, interruptores o aplicaciones en Smartphones, pero ninguno utiliza el mecanismo táctil.
Lo que diferencia a Bolita del resto es que ha sido diseñada para que el sistema de dimmer funcione con el tacto. Con una estructura orgánica en la que predominan las curvas, está compuesta por una superficie redonda que aloja un led situado en su eje central y una bola de cristal superpuesta que al desplazarse atenúa o aumenta la luz. Este movimiento es manual. La idea detrás del diseño es que el proceso de dimerizar sea manual y no electrónico. Bolita busca que el usuario interactúe con ella, reivindicando la cercanía que otorga el sentido del tacto.
Lo que diferencia a Bolita del resto es que ha sido diseñada para que el sistema de dimmer funcione con el tacto
Este diseño ha sido reconocido por la Asociación de Diseño Industrial ADI-FAD en los Premios Delta. Se trata de un premio que reconoce la labor de diseñadores industriales y de empresas productoras fundado en 1961. Desde ese momento, ganar el premio ha ayudado a aumentar el reconocimiento público.
El jurado, formado por personalidades como Davide Groppi o Matali Crasset, entre otros, ha premiado Bolita “Por aportar una experiencia de usuario e interacción con la luz a través del objeto, con el sistema innovador de light dimming táctica. Una luminaria que invita a tocar la luz para modularla al gusto”.
La lámpara ha sido premiada en los Premios Delta que concede la Asociación de Diseño Industrial ADI FAD

Lo cierto es que el mecanismo de Bolita es una ráfaga de aire fresco, pues en un momento en el que la tendencia es a lo interactivo y automático, Bolita es orgánica y manual. Desde Kaschkasch, tienen claro que lo orgánico y modesto es un buen camino, afirman “nuestros productos son una simbiosis entre sencillez y belleza que marca la línea entre la función y severidad”.
El estudio detrás de Bolita
Kaschkasch es un estudio especializado en el diseño de productos que ofrecen muebles, iluminación y arte. Fue fundado en 2011 por Florian Kallus y Sebastian Schneider, quienes comenzaron trabajando como ebanistas y más tarde estudiaron diseño de producto, por tanto, tienen experiencia tanto práctica como académica.
La manera en la que abordan el diseño viene influida por esta experiencia, ellos mismos la definen como “algo que ayuda a que la vida sea más práctica”. Usan técnicas artesanales, pero a la vez, lo combinan con una mentalidad innovadora y confían en la tecnología para dar soluciones a los problemas modernos del día a día.